martes, 28 de septiembre de 2010

Me debato

Me debato una y otra vez ante la convocatoria de huelga de mañana.
Tengo una mala percepción de los sindicatos, pero son los únicos que pueden defender y que defienden nuestro trabajo. Y no me parece casual la campaña de desprestigio de que están siendo objeto por parte de la derecha.
Tengo una mala opinión del trabajo de los partidos de izquierda, pero son los únicos que pueden defender y defienden los intereses de los menos favorecidos. Y no me parece casual que sean los partidos que amparan la corrupción quienes más feroces sean en sus ataques a la izquierda.
No creo en la bondad intrínseca de los partidos políticos ni de los sindicatos ni de las asociaciones de vecinos ni de ninguna agrupación integrada por personas. Pero creo en la afinidad de intereses. Mis intereses son los de la izquierda. Y la izquierda está amenazada. Gravemente amenazada en todo el mundo.
Nos están diseñando una forma de gobierno que consagra el poder de los más poderosos. Nos están diseñando un mundo que vuelve a formas de esclavitud que costó siglos y mucha sangre erradicar. Frecuentemente, con la complicidad de la izquierda.
Quiero que la izquierda abandone su modorra y su complicidad con los intereses del dinero, que diseñe nuevas formas de gestión, de gobierno, que identifique sus intereses. Pero la izquierda parece sorda.
Cuando eso ocurre, ¿qué podemos hacer quienes no tenemos palancas de poder ni lobbys de presión?
¿Qué hacer cuando un sindicato - que en teoría defiende mis intereses - se enfrenta en una huelga a un gobierno en teoría de izquierda - que en teoría también defiende mis intereses -?
No lo sé. Por eso me debato. Porque tengo la percepción de que estamos volviendo hacia atrás, de que nuestros hijos van a carecer de algunos derechos que nosotros creíamos conquistados.
Mientras yo me debato hay quien parece tenerlo más claro, como Almudena Grandes.
Porque mañana nos jugamos mucho.

10 comentarios:

Pilar dijo...

Cómo me gustaría tenerlo tan claro como Almudena, pero ni mis genes son los suyos ni mi percepción de la realidad tampoco.
Estoy enfadada, preocupada e indignada, pero me recuerdo a Demi Moore en Algunos hombre buenos:
"Protesto"
"no ha lugar"
"Protesto enérgicamente"
"Consta, pero no ha lugar"
O en versión cheli, "Si hay que ir se vaé, pero ir pa'na'..."
Quiero un cambio, no un día de paro, quiero una revolución, no un día de enfrentamientos entre trabajadores; quiero que cambien las cosas, no que conste y ya está.
Se que es una burrada pero tengo la triste percepción de que era más facil vivir contra.
Un beso,

Angelillo dijo...

A mí me pasa igual. Tengo una incertidumbre sobre esta huelga. Sobre sus causas, fines, medios, representantes, resultados y todo lo demás. Será que me hago viejo, escéptico y conservador.

Un saludo!

Uma dijo...

Estamos todos parecido! yo tambien me debato pq no acabo de entenderlo bien! debe ser que soy joven,inexperta y conformista o que se yo!

Tita dijo...

Me siento como tú, Tiza, aunque yo tengo más claro que NO VOY. Sin influencias de medios de comunicación, he descubierto que pienso como la mayoría de los que no vamos a ir. Porque la huelga de mañana no cambiará nada, porque la decisión sobre la reforma la tomó papá-estado porque nuestros interlocutores, los que pago cada trimestre no "pudieron" o no supieron negociar, o perder un poco para que un tercero no nos hiciera perder más.

Mal representante es alguien que nos expone en nuestros trabajos cuando tan en la cuerda floja estamos. La huelga no me parece la solución, no ahora.

En cuanto a Almudena Grandes, la adoro, y soy fans-fans...pero con todos mis respetos...que yo sepa, esta señora, tan de izquierdas y que tan bien escribe y me hace disfrutar, lo hace desde su casa calentita, por libre, y o habla por su marido o vaya vd. a saber, los reaccionarios de izquierda que nada saben de enfrentarse a un empresario cada mañana a las 7, bajo cero, o con 40ºC, me empiezan a cargar.

Estar en todos los manifiestos acaba por quemar a cualquiera, y una acaba por perder credibilidad (y eso a mí, que me gusta y me siento afín a ella)

En fin. Si alguien puede secundar la huelga sin miedo a represalias...sois los funcionarios. Los demás no tenemos el coño para ruidos, con perdón. Que llevamos 2 años con los dientes apretados y los coj...por corbata.

¡Vaya bienvenida te doy, hija!

Un abrazo ¡y cuidadín mañana!

Despotrikator dijo...

Yo también tengo muchas cosas en contra de los sindicatos pero en este caso concreto estamos en el mismo lado porque la reforma laboral les perjudica a ellos como organizaciónes tanto como a mí como trabajador. Yo no voy a la huelga porque la convoque ccoo o ugt sino porque las políticas del gobierno han tomado una deriva nefasta para los intereses de los trabajadores (por muy socialistas que se quieran denominar). Me dan igual las siglas. Juzguemos por los hechos.

Y además estar en contra de lo mismo que otra persona u organización no me hace de su misma condición. Yo voté en contra de la constitución europea; Le Pen también, por razones distintas obviamente. ¿Y? Yo apoyo o me opongo a algo según mi criterio. No necesito mirar quién comparte la misma posición para justificar mi convicción. Por eso te animo a ir a la huelga, Tiza.

Un saludo

Anónimo dijo...

Yo estoy trabajando hoy, por que los sindicatos han convocado la huelga fuera de tiempo y lugar, las decisiones ya están tomadas, así que de que va a servir esta huelga ? Creo que para nada.

Besos !

PD.Te dejé un premio en mi blog

IRMA dijo...

Yo celebré cumplir los 18 años porque ya podría votar a quien quisiera (en lugar de ponerme de largo, como las mujeres de Trillo). ¡Qué decepción!. Nunca jamás he votado a quien he querido, siempre ha sido a alguien que no quería, que no me gustaba, y que no me convencía, pero que esperaba menos malo que su oponente. Y voté y lo defendí, por ejercicio de un derecho que había costado mucho conquistar.

Ahora ya no voto salvo en contadísimas ocasiones. He llegado a la conclusión de que no me representa ninguna de las opciones y además es que no quiero que me representen. Ni apoyarlas minimamente siquiera.

Hay una opción malísima que no quiero apoyar y otra aun más malísima que da miedo, y con eso andamos perpetuando el mismo sistema una y otra vez.

Hay que apoyar las inciativas nuevas, las estructuras nuevas que están surgiendo. Hay que participar, gritar, moverse, levantar la voz mucho y en muchos sitios, pinchar en el culo a quienes se quedan sentados.

Esta bien tener conciencia. Vale, ahora toca empezar a moverse y construir otras propuestas y alternativas QUE LAS HAY. LA POLÍTICA SIEMPRE HA IDO DETRÁS DEL PUEBLO, nosotros somos el pueblo, pues hala, todos a moverse o ¿tenemos claro qué estamos haciendo con nuestro inmovilismo y que estamos dispuestos a hacer además de comernoslas dobladas y quejarnos con la boca llena?.

Creo que hay muchas razones para vivir en contra de este sistema que hemos permitido y seguimos consistiendo, sigue siendo fácil. Y "él no sirve para nada" es el mejor argumento para perpetuar que nada cambie. Estaríamos buenos si los movimientos obreros de finales de siglo hubieran aceptado que nada sirve para nada, o las feministas, o todos aquellos que sienten y han sentido que las dictaduras siempre son una aberración.

¡A ESPABILARSE TODOS UN POCO QUE LO QUE NO HAGAMOS NOSOTROS LO VAN A DESTRUIR OTROS!

ODRY dijo...

tesoro yo trabajo, pero me pasaría lo mismo, por un lado cada vez estamos peor, por otros los sindicatos son de trata, que podías esperar si los pagamos entre todos, sin exigirles nada.

Un besazo.

Valdomicer dijo...

Debajo de los adoquines ¿Sigue estando la playa?.

La de la tiza dijo...

Razones de fuerza mayor me han impedido responder antes los comentarios y cualquier cosa que diga ahora ya carece de sentido.
Me ha enternecido el entusiasmo aún no maleado de Irma y admiro el realismo de Despotrikator.
Respecto a las playas bajo los adoquines resulta que, efectivamente, estaban. Lo descubrieron los especuladores y algunos se han hecho y se están haciendo de oro con el descubrimientos.